¿Tu teléfono inteligente durará mucho? Aquí hay cinco cosas que pueden destruirlo y una serie de consejos para corregir los malos hábitos.
Comprar cables de baja calidad
Comencemos con la forma más explosiva de destruir un smarphone: cables de carga baratos y sin garantía. No estoy hablando de fabricantes auxiliares de renombre, sino de los cables USB que podemos encontrar por 1 € en cualquier badulake.
La mayoría de estos cables pueden dañar de forma más o menos grave tu equipo o, lo que es peor, existe el riesgo de incendio o descarga eléctrica. Lo barato puede salir caro: compra cargadores de marcas reconocidas.
Una vez que disponemos de un cable de calidad, es importante mantenerlo en perfecto estado. No lo uses si el cable se pela. Para evitar esto, no tires del cable con fuerza cuando esté enchufado y evita doblarlo fuerte para que no se parta por dentro.
No usar fundas protectoras
¿Has visto la cantidad de gente que va con la pantalla rota de su móvil?
Todos pensamos que esto no nos sucederá a nosotros… hasta que nos pasa. Te puede gustar más la apariencia más limpia de un teléfono sin una funda protectora, pero no vale la pena correr el riesgo.
Incluso los pequeños golpes pueden dañar tu móvil de forma que tendrás que acudir al servicio de reparación de móviles . Estos pequeños golpes también pueden hacer que el valor de reventa tu terminal caiga en picado cuando quieras venderlo para cambiarlo por otro nuevo.
Entonces, para salvar esa posible venta, usa una buena funda protectora que mantenga tu smartphone como nuevo durante el tiempo que lo utilices.
Si quieres ahorrarte pagar las reparaciones en caso de accidente, puedes contratar un buen seguro de daños. No son baratos, pero si es eres propenso a los accidentes, puede merecer la pena.
Maltratar la batería en exceso
Todas las baterías se degradan con el tiempo. Con el paso de los años, su duración máxima no es la misma como la que era cuando compraste tu dispositivo. En los iPhone, cuando la batería se degrada, el dispositivo puede incluso ralentizarse. Esto es inevitable, pero hay malos hábitos que pueden acelerar este deterioro.
Para evitar esto, realiza cargas regulares sin dejar que la batería llegue al 0%. No te preocupes por cargarlo durante la noche.
Simplemente trata de mantener la carga de la batería por encima del 30% para mantener la batería en buenas condiciones durante el mayor tiempo posible.
Probar la «impermeabilidad» de tu móvil
Aunque alguna publicidad puede llevar a la impresión de que tu teléfono móvil es capaz de bucear. No te fíes de este tipo de anuncios. No existe un dispositivo que sea totalmente impermeable.
Sony fue demandada por anunciar que su teléfono móvil Xperia venía equipado con una cámara subacuática, cuando varios usuarios arruinaron sus terminales haciendo la prueba del algodón.
Algunos dispositivos pueden ser más resistentes al agua que otros, pero siempre existe la posibilidad de que entre agua en el interior, y cuantas más veces expongas tu smartphone al agua, es más probable que acabes visitando el servicio técnico.
Por lo tanto, incluso si el nivel de protección de su dispositivo es elevado, úsalo con precaución. Puede que no dañes tu teléfono de inmediato, pero con el tiempo y una exposición repetida, solo te estarás buscando problemas.